Las contraseñas son el principal foco de interés para los ciberatacantes, y muy a pesar de ello, son muchas las personas que gestionan contraseñas con datos personales, cómo fechas, nombres o el típico 123...esto genera una vulnerabilidad inmensa en las compañías porque amplía notablemente la probabilidad de que sea ciberatacada por una de esas brechas en su seguridad.

En muchos casos las empresas pueden creer que están seguros porque no han tenido ningún caso “conocido” que afecte su ciberseguridad, sin embargo, pueden tener infiltraciones dentro de sus sistemas que pueden pasar desapercibidas por muchísimo tiempo.

¡Protége tu compañía!